Es obvio que la situación actual de pandemia que está atravesando todo el planeta está afectando a todos nuestros hábitos de vida social, familiar, laboral y empresarial: confinamientos, la amenaza constante a nuestra salud, fronteras cerradas, viajes limitados, etc. Todo esto está haciendo que la inmensa mayoría de las actividades económicas y empresariales se hayan movido al mundo virtual, en una situación en la que el mundo cibernético parece haber sustituido al mundo físico en prácticamente todas nuestras interacciones. No en vano, uno de los sectores que más ha crecido bajo estas circunstancias es el de las plataformas de videoconferencia online.
En este contexto, es fácil pensar en hacer que nuestro negocio no se vuelva invisible en el exigente mercado chino y queramos mantener una relación más cercana con las redes sociales chinas para mantener una sensación de cercanía con nuestros clientes, proveedores o interlocutores chinos. Pero, ¿dónde podemos empezar? Aquí haremos una revista rápida a dos de las aplicaciones (apps) más utilizadas por el público chino en estos momentos:
En su día ya tratamos sobre WeChat en nuestro blog. Los más familiarizados con el mundo chino, saben que WeChat es una aplicación esencial para vivir en el país. Esta especie de navaja suiza del mundo de las apps no solo sirve para chatear o realizar videoconferencias, que es lo que nos ocupa hoy, sino también para escribir blogs o realizar operaciones bancarias. Es la app más usada, sin duda, en China continental: más de mil millones de personas usan la aplicación en todo el mundo, con más de 900 millones de los mismos situados en la República Popular. Esto convierte a WeChat en una herramienta de marketing estupenda, que nos permite mantener una forma de contacto directo con potenciales clientes o colaboradores, bien a través de perfiles corrientes que publican contenido en su muro, llamado Moments o bien a través de blogs alojados en la propia app o perfiles profesionales. A pesar de que Moments puede ser una opción directa e inmediata, la realidad es que el usuario chino suele ver esta forma de promocionarse como algo que puede resultar molesto, cercano al spam, por lo que el acceso a un blog oficial o una cuenta profesional podría resultar en una mejor y más profesional primera impresión, algo que es fundamental en la cultura del país.
TikTok (Douyin). Otra de las redes sociales que han conquistado el mundo en los últimos años es TikTok, conocida en China como Douyin. Según su empresa matriz, ByteDance, Esta plataforma de videos cortos cuenta con, aproximadamente, unos 400 millones de usuarios activos en el país, lo cual supone el 57% del total de los usuarios a nivel global. Hablamos, sin duda, de una aplicación de largo alcance. Por ello, no es de extrañar que algunas empresas occidentales, sobre todo las orientadas al entretenimiento y el espectáculo (productoras de cine, equipos de fútbol, etc), hayan decidido usar Douyin para promocionarse o ganar presencia en el mercado chino. Hay muchas formas de hacerlo, pero dos de ellas están muy extendidas: una es la de pagar a un canal ajeno para “colar” nuestro anuncio en su contenido y la otra es, evidentemente, crear nuestro propio contenido. Sin embargo, el público target de Douyin está, principalmente, en la generación nacida durante los años 90, quienes generalmente repudian los anuncios escondidos entre el contenido que generalmente aprecian, por lo que la opción de generar nuestro propio contenido para promocionarnos, siempre siguiendo las tendencias del momento en la red, parece una opción más atractiva, sobre todo si podemos implicar al público de alguna forma que se sienta partícipe, así como creando videos cortos que no sobrepasen el minuto de duración. Y, por supuesto, Douyin también cuenta con un servicio de streaming.
En tiempos de pandemia no podemos dejar que nuestro negocio pase desapercibido, pudiendo perjudicar nuestros intereses en China. Usando las plataformas online podemos seguir llegando a mucha gente, creando redes de contactos y manteniéndonos en comunicación permanente con nuestros colaboradores. De la misma forma que conocer las normas de etiqueta y demás constructos culturales en la interacción cara a cara, también es importante aproximarse a los gustos del público chino online, ya que de por sí constituye una parte esencial de la cultura social a día de hoy, sobre todo en los tiempos de pandemia.
Un artículo de: Toni Fernández Palomares